El panorama que ha precedido a la crisis económica ha resultado tremendamente duro para la financiación de las empresas españolas, que se ha traducido en una merma considerable del tejido empresarial nacional. Durante estos años, el mercado financiero tradicional no ha sido capaz de canalizar eficientemente los recursos necesarios para el desarrollo de las empresas,…
El panorama que ha precedido a la crisis económica ha resultado tremendamente duro para la financiación de las empresas españolas, que se ha traducido en una merma considerable del tejido empresarial nacional. Durante estos años, el mercado financiero tradicional no ha sido capaz de canalizar eficientemente los recursos necesarios para el desarrollo de las empresas, debido a los problemas de carácter financiero y a las restricciones impuestas desde el Banco Central Europeo (BCE).
Frente a este panorama, se ha abierto paso la necesidad del desarrollo de medios alternativos de financiación que reactiven la economía española. Atendiendo a esta necesidad, en 2013, nace el MARF (Mercado Alternativo de Renta Fija), cuyo objetivo es ofrecer a pymes más opciones de financiación facilitando la emisión de bonos y pagarés.
Continuando con este proceso de desbancarización, el gobierno aprobó en 2015 la Ley de Fomento de la Financiación Empresarial, una normativa que regula las Plataformas de Financiación Participativa, como Lendix, y permite a España formar parte de la evolución del sector financiero a nivel mundial. Solo en 2015, estas plataformas de préstamos online supusieron un mercado global de más de 185.000 millones de dólares. En España, la financiación alternativa ha llegado a negociar 103 millones de euros en los últimos 3 años.
Queda claro que el mercado español es aún incipiente y se espera que crezca teniendo en cuenta los beneficios que aporta a ambos actores del mercado, tanto a empresas que necesitan diversificar sus fuentes de financiación como a los inversores que están en búsqueda de alternativas rentables.
Para que este crecimiento se torne realidad, es necesario seguir el ejemplo de mercados mucho más avanzados, como en el caso del Reino Unido. Donde el gobierno británico puso en marcha el Plan de Referencia Bancaria (bank referral scheme) obligando a los bancos a trasladar información financiera de las empresas a las que habían denegado un préstamo a las plataformas de financiación alternativa para que pudieran cubrir sus necesidades financieras. De este modo, desde el Reino Unido se está estimulando el desarrollo de la financiación alternativa permitiendo ayudar a más de 100 mil empresas que, según apuntan desde el British Business Bank, antes no tenían acceso a la financiación por parte de los bancos anualmente.
Con este tipo de iniciativas, como fintech que son, las plataformas de préstamos son capaces de ayudar a todos los actores del mercado financiero actual de una manera más ágil y rápida. Las empresas pueden optar por otras fuentes de financiación que se ajustan más a sus necesidades: canales más rápidos, que no les exigen garantías bancarias, que evalúan la capacidad de repago de su deuda, que financian sus proyectos de inversión a medio y largo plazo, o que complementan la financiación bancaria que han obtenido. Mientras los bancos pueden contar con socios tecnológicos que mejoren su modelo de negocio, recuperando así la confianza perdida de sus clientes, sin mencionar que no perderán clientes, dado que las empresas ya no tendrán necesidad de acudir a sus competidores para conseguir financiación.
Otro de los papeles más importantes que están desempeñando las fintech respecto del mercado financiero actual es la innovación. Es decir, tomemos como ejemplo el proceso de las plataformas de préstamos online para ilustrar esta idea.
Por un lado, a la hora de gestionar un préstamo, la rapidez supone uno de los factores más importantes para las empresas que confían en una plataforma de crowdlending como Lendix. Sabemos, por nuestra experiencia, que las empresas están dispuestas a afrontar un mayor tipo de interés si esto les permite obtener la financiación en tan solo una semana, sin incertidumbres o retrasos. Así que para un gran banco surge la pregunta: ¿cómo satisfacer esta necesidad cuando el tiempo para la obtención de un préstamo a través del sistema bancario tradicional toma semanas y hasta meses? Conociendo bien los dos universos, la respuesta es clara. Un banco tradicional puede cambiar su modelo de negocio para satisfacer esta necesidad, aliándose para ello con una fintech.
En segundo lugar, se encuentra su aproximación y poco apetito por el riesgo. Desde nuestra experiencia, los grandes bancos tienen una visión muy polarizada de todo o nada. Por un lado, se encuentran dispuestos a proporcionar crédito a tipos de interés bajos cuando las operaciones implican bajo riesgo y se aportan garantías bancarias. Por otro, excluyen de cualquier posibilidad de financiación a aquellas empresas que no cumplan con estos criterios o que necesiten financiar intangibles.
La aproximación de una fintech al riesgo es diferente, además de atender a través de un concepto gradual y diferenciado a empresas y proyectos excluidos de la financiación bancaria. También allí existe mercado. Es por esto que, resulta de gran interés para un banco aliarse con una fintech en pro de satisfacer esta necesidad de aproximación gradual al riesgo.
Por todo ello, y más, las empresas de fintech están jugando un papel determinante de hoy en día por su complementariedad e innovación aportados al desarrollo del mercado financiero actual.
Grégoire de Lestapis, CEO de Lendix España y miembro de la Asociación Española de Fintech e Insurtech. Anuario de Renta Fija y financiación alternativa IEB-Axesor 2017