El sector de las criptofinanzas es uno de los grandes desconocidos dentro de la industria financiera, puesto que el ciudadano medio no conoce cómo funcionan, cómo se estructuran y cómo operan. Esa es una de las principales conclusiones del coloquio organizado por la consultora Hill + Knowlton España, dentro de su iniciativa H+K Talks, que ha contado con la participación de Rodrigo Buenaventura, presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), y Arturo González Mac Dowell, presidente de la Asociación Española de FinTech e InsurTech (AEFI), que han repasado la situación de los criptoactivos, el código de buenas prácticas, los riesgos y la autorregulación que envuelve a este tipo de activos, cuál será su situación en los próximos años y qué impacto y oportunidades ofrecerá la nueva regulación para las compañías no financieras.

El presidente de AEFI ha destacado esa falta de información que existe, “pese al bombardeo de publicidad y noticias en los medios, que no evita que la ciudadanía no conozca ni entienda el modelo de negocio y las funcionalidades que ofrece el mundo cripto, por su complejidad en cuanto a los procesos y el propio producto”. González Mac Dowell ha destacado la labor de AEFI, en pos de la transparencia y claridad en un sector “que tiene mucho que ofrecernos y que se ha convertido en uno de los avances más disruptivos de los últimos años en la industria financiera».

La regulación es uno de los principales ejes sobre los que tiene que apoyarse el sector cripto, en un momento en el que el Parlamento está a punto de finalizar la tramitación del proyecto de Ley de los Mercados de Valores y de los servicios de inversión, con el objetivo de favorecer la financiación no bancaria de las empresas y aumentar la protección de los inversores y que, entre otras cosas, adapta la normativa para la futura aplicación del Paquete de Finanzas Digitales de la UE y también da nuevas atribuciones en supervisión y sanción a la CNMV. En este sentido, el presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, ha asegurado que “la implantación del reglamento MiCA es imprescindible para dotar de seguridad jurídica a la industria de los activos digitales, especialmente de los criptoactivos fungibles que no sean considerados instrumentos financieros de acuerdo a la regulación MiFID”.

En el escenario actual, AEFI cree imprescindible acelerar la regulación de las entidades que ofrecen servicios de custodia de criptos, de forma que se garantice que se pueden devolver íntegramente a sus clientes y que no están sujetos a su inclusión en ningún tipo de masa concursal, por lo que la asociación apuesta por la existencia de un registro o un régimen simplificado de proveedores de servicios de criptoactivos a nivel nacional hasta la entrada en aplicación de MiCA.