Queramos o no el comportamiento y las expectativas de los clientes han cambiado. No es ninguna sorpresa que el uso de dispositivos móviles y la conectividad de los usuarios 24×7 han revolucionado por completo el consumo y las formas de consumir. También en el sector asegurador. Los consumidores tienen necesidad de agilizar la contratación y…
Queramos o no el comportamiento y las expectativas de los clientes han cambiado. No es ninguna sorpresa que el uso de dispositivos móviles y la conectividad de los usuarios 24×7 han revolucionado por completo el consumo y las formas de consumir. También en el sector asegurador. Los consumidores tienen necesidad de agilizar la contratación y la gestión con sus seguros desde ese entorno digital, sea este un ordenador de sobremesa o portátil, tablet o Smartphone. Por tanto, las aseguradoras, y la distribución de seguros en general tienen la necesidad real de adaptarse a la inmediatez, a una nueva manera de gestionar las solicitudes, mejorando además el tiempo de respuesta en los diferentes procesos, una de las principales conclusiones que también se desprenden del Libro Blanco de InsurTech 2.0., elaborado por la Asociación Española de FinTech e InsurTech (AEFI) con la colaboración de CMS.
Y es que, según ICEA, el 86,1% de entidades aseguradoras afirma haber invertido ya para ofrecer la posibilidad de contratar productos online. Pero la realidad es bien distinta, pues los procesos y la implementación continúan siendo, a menudo, complejos y farragosos. No obstante, si bien de forma histórica los bancos y las aseguradoras han tardado más en integrar la tecnología en sus procesos, a día de hoy, el cambio normativo y la necesidad de reducir costes urgen a acelerar la digitalización en estos sectores.
Los consumidores buscan eficiencia, personalización y comodidad, y las expectativas ahora son mayores que hace años. La transformación digital de la industria aseguradora está en marcha y es esencial no solo para adaptarse a las necesidades siempre cambiantes de los consumidores sino también para captar nuevas oportunidades de negocio. La oportunidad es mayúscula.
Qué aportan las InsurTech
Pero, ¿Qué tienen que mejorar estas industrias? Hasta ahora los principales escollos para la digitalización de sus negocios se sitúan en el plano tecnológico. La arquitectura de las aplicaciones en el sector de los seguros se compone principalmente de sistemas heredados cerrados. No obstante, existen alternativas y posibilidades para la migración a una arquitectura basada en microservicios y en el uso y empleo de API’s, que pueden acelerar el proceso de conexión de los seguros a sistemas de terceros de forma rápida y sin problemas mediante una regulación europea, como refleja AEFI en el Libro Blanco de InsurTech 2.0.
Y las InsurTechs han llegado al mercado para facilitar esta transición. Algunas de las ya presentes en España permiten a las aseguradoras tradicionales integrar una plataforma digital en su cadena de valor, digitalizando así sus propios productos y creando fácilmente otros nuevos, además de poder integrarlos en la oferta de otros distribuidores. Igualmente, en lo referente a la gestión de la relación con los clientes, las plataformas digitales de las InsurTechs facilitan el contacto con los usuarios aumentando la frecuencia de interacción y mejorando el acceso a la información.
Además, gracias al eficiente y productivo análisis de datos posible a través de la inteligencia artificial y los sistemas de aprendizaje automático que utilizan, tanto aseguradoras como bancos y la industria distribuidora pueden comprender mejor las necesidades de sus clientes y fidelizarlos aprovechando las oportunidades de venta cruzada. Y es que los datos abren nuevas oportunidades en la segmentación de clientes y la elaboración de perfiles, ingredientes clave para adaptar los esfuerzos de marketing al target adecuado.
Las aseguradoras tradicionales pueden, asimismo, profundizar en su conocimiento sobre el mercado y sus potenciales clientes, lo que repercute directamente en sus ventas e ingresos, al mismo tiempo que mejoran la evaluación de riesgos para una cobertura más eficiente. Asimismo, a través de las InsurTech, pueden ampliar su oferta de seguros con nuevos productos más flexibles, diseñados en torno al perfil de sus clientes, dando respuesta así a la evolución de las necesidades de protección.
Estas InsurTechs se posicionan, por tanto, como facilitadores tecnológicos más que como competidores de la industria aseguradora tradicional.. También de cara a rejuvenecer su base de clientes, apostando por productos innovadores como los microseguros, con fórmulas de pago por uso y fáciles de contratar, más adaptadas a las necesidades y preferencias actuales de los clientes.
Así, en un contexto donde los ecosistemas digitales ganan cada vez más relevancia ante el consumidor, las aseguradoras tradicionales deberán reforzar sus estrategias de colaboración para integrar a las InsurTech -y todo lo que aportan- en su cadena de valor. Las más exitosas serán, probablemente, aquellas que identifiquen a los socios adecuados con los que colaborar estratégicamente.
Luis Oliveira, Country Manager de YOLO Group en España